Escribí esta entrada del blog a la orilla del río sentada sobre una piedra que, para qué mentir, me dejó el culo plano.
Las vistas, muy bonitas. El resultado, una mierda.
No me gusta. Fin. Paso de publicar algo que no tiene mi “toque”. Ya sabéis, ese que el que te conoce dice “cuando lo he leído le he puesto tu tonillo y tu voz dulce y aterciopelada” (guiño, guiño)
Así que, a la mierda. Vuelvo a empezar. Total, si algo me gusta a mí es hablar y si hay que escribirlo, pues se escribe.
Dedos ágiles es mi segundo nombre.
Al lío.
Llevo algún tiempo observando la vida de mierda que lleva la gente.
Claro, claro, yo vivo en los mundos de Yupi (qué viejuna soy, por dios).
Pues no. La única diferencia entre mi vida, que va siendo cada vez más gustosa, y una vida de mierda son las decisiones que tomas, o que no tomas.
Decisiones, yeah.
No tomo decisiones a nivel pro ni nada de eso, algunas me cuestan la vida y otras, ale, a lo loco y sin pensarlo mucho.
Que me compran mi casa, pues se vende.
Que me voy de viaje, pues todo al trastero.
Que no me entran las bragas en el maletero, pues a la guantera (algunos ya sabéis de qué va el tema jijiji)
Que me dio miedito y me da, pues también.
Pero si alguien piensa, cree o deduce que me arrepiento, está muy equivocado.
La mejor libertad es la de poder decidir todos los días por uno mismo.
Tengo obligaciones, sin duda, pero yo decido cómo hacer que todos los días tengan esa alegría que da poder disponer de tu tiempo.
No os voy a vender ningún curso de mentalidad, que para eso hay gente muy requetepreparada, de hecho, gracias a esa gente, mi vida me motiva.
Os lo recomiendo, de verdad.
Tomar decisiones, aunque os den miedo y la gente piense que os habéis vuelto locos.
Disfrutar de esta vida, porque haya o no haya más, esta es la que tenemos en este momento.
Ala, hasta aquí mi charleta de hoy. Breve para no aburrir. Amenazo con continuar.
Por cierto, ya sé que mi blog no tiene botoncito de “me gusta”, paaaaso. Si queréis decirme algo ponéis un comentario. Que somos vagos hasta para opinar, ale, le damos al corazoncito y listo.
Que yo también lo hago ehhhh, pero mira, estoy rebelde. NO hay botoncito de Me Gusta. PUNTO.
Y ahora sí, termino.
Chaíto.
3 respuestas a “Si no me gusta, a otra cosa.”
Se tenia que decir. Pues va Ainhoa y lo dice.
Barbara!!!👏👏👏
😘😘😘😘
A corazón abierto!
Qué pedrá tienes!!! Sarcasmo eh…